Tal cual. No la compres. Es normal que a la hora de buscar un nuevo hogar nos dejemos sorprender por detalles que nos nublan el juicio. ¡Y eso no significa que los detalles no importen! De hecho, en las pequeñas cosas está la diferencia entre una casa cualquiera y tu hogar. De cualquier forma, hay ciertos puntos que deberías de considerar antes de tomar esa gran decisión de invertir en un patrimonio. Para que no te pierdas, aquí te dejamos una breve guía.
1. Más grande no es mejor, más chico no es más acogedor
Un punto muy importante es saber qué tamaño necesitas. Una propiedad enorme, con un gran jardín o una terraza inmensa puede sonar tentador. Al final del día, la idea de “lo grande” y “lo lujoso” están conectadas, pero esto no tiene por qué ser así. Imagina un departamento amueblado a tu gusto, en la mejor zona de la ciudad, con una vista impresionante del paisaje urbano de esta Ciudad Blanca. Si eso no es lujo, ¿entonces qué lo es? ¡Y sin necesidad de grandes hectáreas!
Foto: Naomi Hébert
Es importante, entonces, saber exactamente qué espacio necesitamos. ¿La casa será nada más para ti? ¿Tu pareja y tú tienen hijos? ¿Cuántos? Y si no, ¿están dentro de los planes a corto y largo plazo? También tienes que pensar en tus familiares, especialmente si viven fuera de Yucatán. ¿Los recibes en tu casa? ¿Cuántos podrían llegar a quedarse en tu casa en época de vacaciones?
Contestar estas preguntas te ayudará a decidir el número de habitaciones que necesitas y el tamaño de propiedad ideal para ti.
2. Compras hoy, para toda la vida
Eso nos lleva al siguiente punto. Recuerda que invertir en un patrimonio, es invertir en el futuro. Imagínate paseando en el jardín, tomando café en la sala, viendo una película en la recámara. Si vivirás en un desarrollo con amenidades, ¡visítalas todas! Imagínate una vida en las áreas comunes, piensa cuál será tu zona favorita en un futuro cercano, mediano ¡y lejano! Así disfrutarás tu nuevo hogar al máximo. Recuerda pensar en todas las etapas de tu vida y asegurarte de que tu hogar sea ideal para el presente y el futuro.
Además, ¡no olvides pensar en tu hogar como una inversión! ¿Conoces cuáles son las mejores zonas de la ciudad? Piensa en que cada compra que haces en el mundo inmobiliario puede ser una mina de oro en potencia, o un montón de billetes viejos y rotos bajo el colchón… ¡Compras para toda la vida! Considerar la parte personal y económica a futuro es de suma importancia.
3. “Todo cerca” no significa sólo el trabajo
La cercanía es un punto clave y sin duda ya lo tomaste en cuenta. Por el otro lado, a veces sólo consideramos la mitad de la cuestión.
Sin duda es vital tener todo cerca. Visitar los alrededores de aquella casa o departamento, revisar los centros comerciales, saber qué puedes tener a la mano caminando, en bicicleta o transporte público y para qué tendrás que usar el auto. De cualquier forma, esto no lo es todo.
Considera también la cercanía de grandes centros poblacionales. Si eres una persona que ama la vecindad, la socialización y conocer nuevas personas, ¡tu vivienda ideal se encuentra cerca de centros comerciales y residenciales! Si eres más reservado, prefieres las amistades antiguas y la tranquilidad, busca una propiedad a las afueras de la ciudad, o alejada de centros sociales.
4. Todos los ángulos, todas las caras
Ya viste mil propiedades, te gustaron cien y consideraste diez. Y ahora que tienes una en mente y te estás enamorando de ella, conviene conocerla muy bien. Visítala en la mañana para ver cómo despertarás, en la tarde para sentir las temperaturas y en la noche para conocer la luminosidad. ¡Para enamorarte de tu próxima propiedad, tienes que conocerla por completo, a todas horas del día.
Foto: Construye Hogar
Escribe estos puntos en una lista, y cuando tengan todos una palomita ¡ya es tiempo de invertir en esa propiedad! ¿Tienes más dudas o requieres asesoría? ¡No dejes de preguntar! Resolver todas tus preguntas te ayudará a tomar esta decisión tan importante.