La cadena hotelera CitizenM anunció recientemente que abrirá un nuevo hotel en Washington D.C. Esta sería una noticia más en el mundo inmobiliario, pero el hecho es que CitizenM tiene un concepto innovador de gran interés que valdría la pena analizar. A fin de cuentas, parte de la grandeza de un negocio está en aprender de todo lo que le rodea. El uso del espacio, el volver a pensar los conceptos y crear desarrollos donde el cliente sea prioridad son parte de las cosas que resaltan de su concepto. ¿Qué podemos aprender de este modelo? ¡Veámoslo!
Mi lugar < Espacio comunal
La tendencia cosmopolita de nuestro mundo ha creado conceptos de vivienda muy distintos. Se empiezan a ver con más frecuencia, por ejemplo, las comunidades planeadas. Tener todos los servicios cerca y el apoyo de una comunidad a tu al rededor, ha demostrado ser un sistema de vida lujoso, funcional y eficiente.
Los hoteles de CitizenM retoman esta idea, creando un espacio personal minimalista y lobbies funcionales. De esta forma, en el cuarto sólo hay lo mínimo indispensable: agua y Wi-Fi ilimitados, televisión por cable y una cama suave y extra-grande.
Foto: citizenM
“Me he quedado en cuartos de hotel tan grandes, que podría vivir en ellos”, comenta Rattan Chadha, fundador y chairman de CitizenM. Con esta ideología, el espacio en el cuarto es menor que el espacio general. Los lobbies son el espacio donde el huésped se desarrolla, pasa la mayoría del tiempo y disfruta su estancia.
Diseñar espacios es crear experiencias
Recordemos que Chadha antes de crear este concepto hotelero, fue un activo miembro de la industria de la moda. La perspectiva del diseño que adquirió a través de la fundación y manejo de Mexx le permitió tener una visión muy clara del ambiente que quería en sus espacios comunes. Así, decidió unir esfuerzos con la compañía de diseño y muebles Vitra, buscando crear habitaciones funcionales, cómodas y agradables.
Foto:citizenM
Nosotros tuvimos la misma visión en el diseño interior de Torre Uno en la búsqueda para crear experiencias a partir de los lugares que te acompañarán todos los días. Así dejamos de pensar en una oficina, y nos ponemos a diseñar un concepto donde el cliente nota un ambiente distinto y donde tú te sientes cómodo con tu espacio y tu productividad aumenta al máximo. Con las salas de juntas, de proyección y conferencias totalmente equipadas con mobiliario Hermann Miller, logramos el sueño de Rattan Chadha: hacer del espacio una obra de arte.
Lujo y funcionalidad
Entonces ¿qué es lo que podemos rescatar de este diseño inmobiliario? Lo más importante es que el lujo y la funcionalidad no están peleadas. Al crear proyectos, pues, hay que tener en cuenta que se busca un lugar donde el habitante se sienta cómodo a través de las amenidades y que también supla sus necesidades.
Diseñar, y al hacerlo pensar en la pareja que estrenará su departamento, en el equipo que conseguirá nuevos clientes en su nueva oficina, en la familia que se formará en esta casa. Lograr así espacios donde sus habitantes sean los más beneficiados. Lograr así un nuevo estilo de vida.